Hitler sobre los pueblos bálticos y eslavos

Cuando Goebbels expresa su desprecio por los pueblos bálticos y Ucrania simplemente sigue las opiniones de su Führer. Al igual que él, no distingue entre bálticos o eslavos, aliados o enemigos. Todos son simplemente subhumanos.

[Noche del 17 al 18 de septiembre de 1941]

Los pueblos eslavos no están destinados a vivir una vida propia. Lo saben y haríamos mal en persuadirles de lo contrario. Nosotros somos los que creamos en 1918 los países bálticos y Ucrania. Pero hoy no tenemos ningún interés en mantener los estados bálticos ni en crear una Ucrania independiente. Habrá igualmente que impedir su vuelta al cristianismo. Sería un gran error, sería darles una forma de organización.

Tampoco soy partidario de que haya una universidad en Kiev. Más vale no enseñarles a leer. No van a querernos porque les torturemos con escuelas. El solo hecho de darles una locomotora para conducir sería ya un error. ¡Y qué tontería, por nuestra parte, proceder a una distribución de tierras! A pesar de todo esto, haremos que los indígenas vivan mejor de lo que han vivido hasta ahora. Entre ellos encontraremos el material humano necesario para cultivar la tierra. Sigue leyendo

Goebbels, el fusilamiento de rehenes y las deportaciones al Este

20-abril-1942

El más reciente acto de sabotaje [en Francia] contra un tren militar alemán, atentado que ocasionó varias muertes, será castigado con severas represalias. Se duplicará el número de individuos fusilados y un millar de comunistas y judíos marcharán hacia el Este en vagones de ganado. Pronto comprenderán que no es nada divertido pretender perturbar la política alemana para establecer un nuevo orden en Europa.

21-abril-1942
El mando militar en Francia ha adoptado las medidas más rigurosas como consecuencia del sabotaje ferroviario del día dieciséis. Treinta rehenes (judíos y personas relacionadas con los autores) serán fusilados, en lugar de los veinte previstos en el primer momento. Si los autores no han sido hallados dentro de tres días, otros ochenta más serán fusilados y un millar de judíos y comunistas (en lugar de los quinientos calculados al principio) deportados hacia el Este.
Joseph Goebbels: Diarios (The Goebbels Diaries. Edición de Louis P. Lochner) Traducción de Eduardo de Guzmán. Editorial Los libros de Nuestro Tiempo, José Janés director. Barcelona 1949. Pgs. 193 y 194.

Goebbels: identificación entre partisanos y judíos

16-marzo 1942
Leo un informe del SD acerca de la situación en las regiones ocupadas del Este. La actividad de los partisanos se ha ido intensificando considerablemente en las últimas semanas. Están realizando una guerra de guerrillas perfectamente organizada. Es difícil cogerlos porque emplean tales procedimientos de terrorismo en las zonas ocupadas por nosotros que la población tiene miedo de prestarnos su colaboración. Los dirigentes de esta actividad partisana son los comisarios políticos y especialmente los judíos. Se demuestra una vez más la necesidad de seguir fusilando judíos. No habrá paz posible en esas regiones en tanto los judíos puedan moverse. No caben sentimentalismos. Sigue leyendo

Goebbels y Hitler, el falso humanitarismo y los judíos

27- abril-1942
El Führer se mostró partidario de una dirección mucho más radical de la guerra y de la política. Este será uno de los puntos fundamentales de su discurso en el Reichstag. Se queja amargamente de que el general francés Giraud haya logrado escapar. Fue posible únicamente por la negligencia y descuido de los guardianes. Los viejos oficiales de la reserva que están al frente de los campos de prisioneres de guerra tienen un concepto erróneo del humanitarismo. (eine falsche Humanitaetsduselei), que en este caso concreto estamos pagando muy caro….
Hablé una vez más detalladamente acerca de la cuestión judía con el Führer. Su actitud no ha variado. Está decidido a expulsar a los judíos de Europa. Tiene razón. Los judíos han traído tantas desgracias a nuestro continente que el castigo más severo que pueda imaginarse será aún demasiado benigno para lo que se merecen…
Joseph Goebbels: Diarios (The Goebbels Diaries. Edición de Louis P. Lochner) Traducción de Eduardo de Guzmán. Editorial Los libros de Nuestro Tiempo, José Janés director. Barcelona 1949. Pg. 207.

Goebbels, en sintonía con su Führer

20-marzo 1942
Finalmente hablamos [Hitler y Goebbels] del problema judío. En este punto el Führer se mostró tan decidido y resuelto como siempre. Los judíos tienen que desaparecer de Europa, aunque sea necesario emplear para ello los más brutales procedimientos.
Por el momento no desea intervenir activamente en el problema de la iglesia. Le gustaría dejarlo para cuando termine la guerra.
Toda nuestra conversación transcurrió de la manera más cordial e íntima. Me sentí feliz al verme de nuevo al lado del Führer. El Führer, a su vez, no ocultaba su satisfacción al poder hablar de una manera tan desembarazada y personal.

Joseph Goebbels: Diarios (The Goebbels Diaries. Edición de Louis P. Lochner) Traducción de Eduardo de Guzmán. Editorial Los libros de Nuestro Tiempo, José Janés director. Barcelona 1949. Pg. 152.

Goebbels sobre la ingenuidad de los aliados de los nazis

16-marzo 1942

Las corrientes nacionalistas se intensifican también de una manera notable en todo el Este y especialmente en los antiguos estados bálticos. Sus habitantes se imaginaban, sin duda, que la Wehrmacht alemana iba a derramar su sangre para instalar gobiernos independientes en esos estados mosquitos, gobiernos que al finalizar la guerra, e incluso, antes de que terminara, podrían colocarse al lado de nuestros enemigos. Es una ingenuidad infantil que no puede impresionarnos en lo más mínimo. Sigue leyendo

Goebbels y el cine polaco en yiddish

18-febrero-1942

Por la noche vi la película polaco-yiddish «El Dybuk«. La película quiere ser un film de propaganda judía. La verdad, sin embargo, es que resulta tan antisemita que uno se asombra al comprobar lo poco que los judíos saben de ellos mismos y cómo desconocen lo que resulta repulsivo para los que no son judíos. Contemplando esta película comprobé una vez más que la raza judía es la más peligrosa de todas las que pueblan el globo y que no debemos tenerles compasión ni indulgencia. Esa gentuza tiene que ser eliminada y destrozada. De otra forma no sería posible que el mundo disfrutase de la paz.

Joseph Goebbels: Diarios (The Goebbels Diaries. Edición de Louis P. Lochner) Traducción de Eduardo de Guzmán. Editorial Los libros de Nuestro Tiempo, José Janés director. Barcelona 1949. pg. 102.

[Por cierto, el director de esta película fantástica basada en una obra de teatro, Michal Waszynski, murió de un ataque al corazón en Madrid en 1965. Fue productor ejecutivo o asociado de películas como El Cid (1961), 55 días en Pekín (1963), La caída del imperio Romano (1964) y El maravilloso mundo del circo (1964), todas ellas rodadas en España.]

Goebbels: Los nacionalistas de los estados bálticos y Ucrania, influenciados por los judíos

Una de las paradojas del pensamiento nazi: Goebbels acusa a «los judíos» de las dificultades que empiezan a tener los alemanes con los nacionalistas de Letonia, Estonia, Lituania y Ucrania. Unos nacionalistas que en una buena proporción colaboraron con los nazis para matar y saquear a sus compatriotas judíos. Las cifras de judíos que se dan en las actas de la «Conferencia de Wansee» del 20 de enero pasado son muy esclarecedoras. De los 11 millones de judíos que estiman que aún hay en Europa, sólo hay una única región que consideran completamente «libre de judíos», Estonia.
6-marzo-1942

Un informe del SD da cuenta minuciosa de la situación en la Rusia ocupada. Es mucho más inquietante de lo que generalmente se cree. El peligro partisano aumenta de semana en semana. Los partisanos son dueños de algunas grandes zonas de la Rusia ocupada, implantando en ellas un régimen de terror. Los movimientos nacionalistas, por su parte, adquieren mayor insolencia de lo que supusimos en un principio. Y esto puede aplicarse tanto a los estados bálticos como a Ucrania. En todas partes los judíos se mueven procurando crearnos dificultades. Es comprensible, por lo tanto, que muchos de ellos tengan que pagar sus delitos con su vida. De cualquier forma, estoy convencido de que cuanto mayor número de judíos liquidemos, más consolidaremos la vida de Europa después de la guerra. Sigue leyendo

Goebbels. Los bombardeos y los ancianos judíos

Por la prudencia de Goebbels …y de los archivistas soviéticos, los diarios que escribió a lo largo de toda su vida han llegado prácticamente íntegros hasta nosotros. Aún está en curso de publicación en alemán, pero partes de los años 1942-43 también cayeron en poder de los aliados occidentales, y ellos no los enterraron bajo siete llaves, sino que se publicaron casi inmediatamente. En España fueron publicados por primera vez en la edición que aquí citamos, pero también posteriormente por Plaza&Janés en varios años. En 1977 también se encontró la parte correspondiente a casi todo 1945, también  publicada en España por Plaza&Janés en 1979, y que acaba de ser reeditada por La Esfera de los Libros.

En su momento, por supuesto, los neonazis pusieron en duda su autenticidad, sobre todo porque aquí y allá había referencias, más o menos veladas, al holocausto, con alusiones directas a las «profecías» de Hitler, y a su propia responsabilidad en la persecución de los judíos. Goebbels desde su juventud escribió su diario a mano, pero a partir de julio de 1941 se acostumbró a dictarlos a un estenógrafo, que posteriormente pasaba a máquina. Según iba empeorando la guerra creció su obsesión por dejar clara su huella en el mundo, y en 1944-45 encargó que se microfilmaran para asegurar su conservación. Según sus taquígrafos, aunque no descuidó nunca su dictado diario (que llegó a producir entradas de 100 páginas)  nunca tuvo tiempo de leer la transcripción y corregirlos, así que se conservaron tal cual, con todo tipo de fallos gramaticales y muletillas. También estaban pensados como futuro material de trabajo, de ahí su peculiar estilo, mitad confidencia, mitad discurso. Sigue leyendo

Goebbels en su diario: «Sobre los judíos cae una sentencia que, aun siendo bárbara, la merecen por entero»

De vez en cuando, y quizás en la estela de Irving, alguien se descuelga con eso de que «esas barbaridades» que se cometían, especialmente contra los judíos, no eran responsabilidad directa de Hitler. Que sus discursos eran sólo eso, palabras que «algunos exaltados» interpretaban a la tremenda. Aquí tenemos otra referencia más a las «profecías» de Hitler en sus discursos, y cómo se «emitían» y tomaban completamente en serio.

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